miércoles, 4 de febrero de 2009

el gran paso


50 metros separaban a G del suelo.
Sin notarlo había acumulado en los últimos años la suficiente carga vivencial para no tener dudas ni miedos. Estaba convencido que aquella energía bastaba para dar el gran paso hacia la más sublime sensación de paz y libertad que el hombre jamás haya anhelado. G tenía claro que no se trataba siquiera del placer como un motor vital aquello que nos hacía levantarnos de la cama, comunicarnos, relacionarnos, amar, competir, crecer, reproducirnos. Había algo más elemental y primario. G lo llamaba nuestra necesidad de entretenimiento. Básicamente necesitamos "estar haciendo cosas" que nos quiten el aburrimiento mientras corren los días. Así, desde leer, hasta formar una familia, se convertía elementalmente en productos de nuestra necesidad de estar entretenidos con algo. No importa si es placentero, doloroso, alegre o triste. Se trata de burlar el paso del tiempo que la vida necesita para no sentirla pasar e inevitablemente morirse de aburrimiento. G estaba inmerso en su dorado pantano de nihilismo y al haber comprendido por primera vez todo, estaba convencido que este gran paso cerraría su capítulo para siempre antes de llegar aún mucho más lejos.

G había logrado lo que a los ojos de los demás un hombre afortunado podría hacer en una vida; el éxito le sonreía, tenía una familia ideal, un fraterno grupo de amigos, dinero, poder, salud.
Aquella mañana, la mayoría de las personas importantes para él estaban con los pies el la tierra mirando hacia el cielo a un G a punto de dar el gran paso y trascender la barrera que separa a los hombres que sólo alcanzan tener una vida doméstica, cotidiana y banal de aquellos que buscan liberarse de ese vacío que hace que creas tenerlo todo, cuando en verdad no tienes nada.
Así fue que todos despidieron a G en su viaje desde la tierra hacia el infinito, comprendiendo que su decisión obedecía a la eterna búsqueda no resuelta del hombre : la verdadera libertad.
Entonces G les dedicó a los presentes una mirada cálida desde lo alto para luego cerrar los ojos. Estiró los brazos, dio un paso hacia adelante y voló.
Mientras familiares, amigos y conocidos lo observaban emocionados alejarse sobre las nubes, la voz de su primogénito rompió el silencio del momento diciendo - cuando sea grande quiero ser como papá.

...

32 comentarios:

Dr_GV dijo...

Pensar que postergué mi salto, al abrir el blog y ahí le voy contando al mundo la rutina de mi perezosa vida. A lo mejor ese tal G sea yo dentro de unos años. O a lo mejor a G le hubiesen contado sobre la blogósfera , quien sabe.

Con cariño otra G.

VeRoNiKa ♫ VeCa ♪ LiFe dijo...

Muy Bueno... lo que mas me encanto es: "la barrera que separa a los hombres que sólo alcanzan tener una vida doméstica, cotidiana y banal de aquellos que buscan liberarse de ese vacío que hace que creas tenerlo todo, cuando en verdad no tienes nada..."
Espero ser G algun dia, y poder separar esas barreras y que me digan algun dia "cuando sea grande quiero ser como mi mami".

Un saludo Te leo.
Veronika

Katy dijo...

gran post,muy interesat(:

gracias por comentar mi blog;D

te leo.

Un beso!

Unknown dijo...

no si yo a veces comprendo a los señores G perfectamente...

miralunas dijo...

con eso me hiciste acordar de oliverio girondo, un poeta argentino, un percanto irreverente, que escribió:
No se me importa un pito que las mujeres
tengan los senos como magnolias o como pasas de higo;
un cutis de durazno o de papel de lija.
Le doy una importancia igual a cero,
al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco
o con un aliento insecticida.
Soy perfectamente capaz de sorportarles
una nariz que sacaría el primer premio
en una exposición de zanahorias;
¡pero eso sí! -y en esto soy irreductible- no les perdono,
bajo ningún pretexto, que no sepan volar.
Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!
te lo regalo, limeño. (seguro que solo te enamoras de las que saben volar)

Daphne dijo...

lo más triste de la tristeza está clarito en el final

KT dijo...

Miralunas puso el mejor comment. El espantapajaros es la mejor respuesta a tu post

dmoOn dijo...

hoy dia tengo ganas de volar

verdemundo dijo...

Qué sensación que dejas al final con la intención del hijo!! Genial.

R. dijo...

Un ángel

Anónimo dijo...

Realmene evocador y maravilloso...

... siempre y cuando consiguiese echar a volar, claro.

Un fuerte abrazo desde el Otro Lado

Elsie Ralston dijo...

Me gusta. Mucho.
Beso.

JOSEFINA dijo...

Por lo menos G se atreve a ser distinto. No hay necesidad de saltar a un vacío verdadero...podemos seguir en la vida saltando virtualmente pero siendo auténticos y viviendo lo que queremos.

Juan Manuel Robles dijo...

¿Aterrizó sobre el Hudson?

fgiucich dijo...

Muchas veces las historias se repiten. Abrazos.

Noelia A dijo...

Ya ves, ahora sabés la humanidad tiene una vida conflictiva y siempre fallando algunos de los tres pilares básicos que son la salud, el amor y el dinero: pa no aburrirse, pues!

Unknown dijo...

siempre uno tiene ganas de dar ese gran salto.
Amo este blog!!!

Daphne dijo...

te he invitao a hacer un meme!

chequea en mi bló!

Clau dijo...

Ojalá todos fuéramos valientes para dar uno, dos, tres, chorrocientos (e infinitos) grandes pasos.... :)

Lindo post... hace que uno ponga pause y piense en su propia vida.

Besos!

Anónimo dijo...

al final, el final es solo nuestro, a pesar que ni nos pertenecmos. que buen final.
bsos

MORGANA dijo...

para qué queremos unas alas intactas.

Anónimo dijo...

Más que interesante.
me gustó mucho.

Besos,

Pilar Mandl dijo...

Inquietante historia... te deja pensando como todas las tuyas.
Veo que has cambiado de nuevo la imagen :-)
Al final no me contestaste a lo de VIVA 2.

Un beso

Soledad Di Pasquale dijo...

Muy lindo todo por acá :)
Voy a empezar a visitar tu morada más seguido.

Gracias por visitar mis pecosidades!

saludos!

Blackberry dijo...

Empecé a leerte, me enganché a tus historias y luego te perdí...
Hoy te encontré de nuevo y me volví a enganchar...
Volveré a pasar por aqui.
;*)

El perro andaluz dijo...

A veces he podido volar sin llegar a saltar, pero algún día...sin falta.
Unn abrazo, bró

Cathy Pazos dijo...

Muy buen post, hay días en lo que un salto no basta, mejor es volar..

Besitos

;D

en las nubes dijo...

Madre mia!!!

genial ese final...

Apologética dijo...

Buen salto...ese va directo a Dios seguro, ya vaya hacia arriba o hacia bajo.

Elisa Fuenzalida dijo...

Debes ser una persona muy especial. Un abrazo.

reflejosdelsur dijo...

Gracias por estas historias de G.

Un abrazo,

RDS

Cys dijo...

Que egoísta, me da cólera tu personaje