martes, 28 de julio de 2009

primera vez


Tu geografía luego se volvió refugio de una intensa biodiversidad emocional. Solos los dos, qué más faltaba en este espacio colmado de tiempo?
Con la paz, mis dedos colonos te exploran como celosos invasores de tu tibia superficie ahora exenta de pureza. Alejada del dominio de la luz, pude contemplar como se extendía eterna y húmeda. Fuera de toda calma, palpitas bajo tu superficie a manera de lamento, brillante y con terciopelo perlado cubriendo todo tu ser, elevándote y encogiéndote como un respiro. Reinaba el silencio tras el caos en esa dimensión que nunca acepté como modesta y que finalmente hice mía sobre tí, sobre el suelo y sobre mis principios. Qué te puedo decir sobre el mismísimo momento; poesía pura. Soñado, repasado, imaginado y masturbado tantas veces. Masticado, dilatado, violentado, alterado, reinventado tantas otras. Finalmente ejecutado con gracia y compás. Detalles: extrañé una mirada, un instante de contacto visual. Gran ausencia. De ahí que concluyo que la física triunfó sobre la química en esta combustión. Le faltó alma, pero de ninguna manera eso alteró el resultado, al menos para mí. Me quedo con tu silencio esquivo, tus labios apretados, tus párpados ajustando la mirada, como queriendo protegerla de una segunda puñalada. No importa ahora, aunque no te pude clavar con la mirada, igual conseguí clavarte con lo que quería. Igual que me clavé en el barrio, en tus paseos, en nuestras primeras palabras y sobre todo en tu futuro, ése que se quedará entre nosotros desde hoy. Ahora, quedan mis dedos paseando sin señales sobre ti. Adaptados al clima, repasan y registran los segundos para alimentar los recuerdos que seguro ambos viviremos cada vez que cerremos los ojos. Esa será nuestra unión, un sueño que renacerá cada noche y aunque físicamente estemos separados, no te olvidaré y lo mejor, tampoco podrás olvidarme. No, de esta marca no te olvidas.
No tienes que llorar, también es mi primera vez, pero confieso que pudo haber sido distinto si no hubiera tenido que forzarte.

...